La niña

viernes, 2 de octubre de 2009

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"Dead babies can take care of themselves
Dead babies can't take things off the shelf
Well we didn't need you anyway
ma ma ma-ma, ma ma ma ma-ma, ma ma ma
Goodbye, Little Betty"

Alice Cooper- Dead Babies


El único momento de respiro que tenía era cuando tocaba la guitarra eléctrica. Obviamente, sin luz, sonaba con menos cuerpo, y las cuerdas sonaban sin fuerza, con ese característico timbre metálico apagado. Pero bueno, me servía para alejar mi mente de lo que estaba sucediendo en el exterior. Hasta que oí unos gritos que provenían de la calle. No eran los primeros que escuchaba, pero ésta vez decidí ver qué pasaba.

Abrí las puertas del pequeño balcón del salón, me asomé, y entonces la vi. Era una niña pequeña, de no más de 5 años. Lo que más me llamó la atención era su melena negra, demasiado larga, a mi conservador modo de ver, para una niña tan pequeña. Bueno, eso y que parecía que estaban asesinando a su madre.

- ¡Mamá! - gritaba a una manada deforme de siluetas enfervorecidas.- ¡Corre, ven!

Estaba claro que su madre no tenía escapatoria. Le habían dado caza. De hecho ya no se la podía ver, entre la maraña de manos e infectados que estaban destrozándola. Serían unos 5 o 6 los que la estaban machacando. La jauría comenzó a agacharse poco a poco, señal inequívoca del final de la mujer. Parecía que ignoraban a la niña, demasiado ocupados con su reciente festín. La pobre se encontraba a unos escasos metros de la escena, llorando, chillando, pero dando pasos hacia atrás, alejándose poco a poco.

- ¡Oye! ¡Aquí arriba! - grité lo más fuerte que pude. Me pregunté a mi mismo porqué había decidido ese momento para actuar, habiendo tenido otras oportunidades para demostrar valor, pero no obtuve ninguna respuesta.

La niña, con los ojos llenos de lágrimas, giró la cabeza en dirección hacia donde yo estaba asomado. Uno de los infectados dejó la presa abatida y empezó a girarse hacia la cría.

- ¡Por aquí! ¡Corre hacia el portal! Bajaré para abrirte. ¡Corre todo lo que puedas!- le chillé, mientras apuntaba con mi mano hacia abajo, hacia la entrada del edificio.

Cuando vi que la niña me hacía caso y empezaba a correr hacia mi portal, salí del balcón y me dirigí a la entrada. Pensé que era mejor no correr mientras bajaba por la escalera, aunque nunca lo hacía por miedo a caerme, debido a los viejos y desgastados escalones que van del tercero al segundo, y que hacen peligroso el saltar de dos en dos los escalones o hacer carreras por la escalera. Cuando llegué al zaguán, vi a través de los cristales la sombra de la pequeña.
Abrí la puerta y cuando me disponía a agarrar a la niña del brazo y meterla en el edificio, me quedé paralizado. Él o eso estaba mucho más cerca de lo que suponía. Andaba a un ritmo normal, pero había algo raro. Eran los brazos, no seguían la cadencia al moverse, se balanceaban de un modo extraño. Pero lo que más me impresionó fue su cara. Esa cara que aparece en las mejores pesadillas, que sólo esperas ver en las películas. Pero diferente. Y real. Sobre todo los ojos, vacíos, pero clavados en la niña. Y cada vez más cerca.

- ¡Por favor! ¡Ya viene!- la niña me arrancó súbitamente de la parálisis, justo a tiempo para empujarla hacia dentro del portal y cerrar la puerta. Y allí se quedó él.

- Perdona.- me disculpé- Vamos, subamos a mi casa rápido.
La alcé con mis brazos y noté su calidez, y cómo me abrazaba con fuerza del cuello. Sepultó su cara en mi hombro y comenzó a llorar desconsoladamente. Subí de nuevo las escaleras, pero, ésta vez sí, lo más rápido que pude.

2 comentarios:

Espigol dijo...

Tú estás loco!! Ahora ya saben donde vives y saben que encima sois dos!! ¿Qué piensas hacer con la niña? No la vas a poder salvar. Si tienes que salir huyendo, de nada te servirá ser un corredor nato teniendo como acompañante a una niña de 5 años. Lo único que vas a conseguir es que ninguno de los dos sobreviva.

Esto es como en Entrevista con el vampiro, la compasión del protagonista no va a conducir a nada mejor que al más absoluto de los desastres. Seguramente, la has condenado a algo peor intentando salvarla.

Ya veremos querido Mortimer, ya veremos.

El zombie que chupa limones dijo...

No creas, Laura, olvidamos deprisa,,,